Aston Martin ha dicho adiós a Dan Fallows, el hombre que en 2023 les llevó a soñar con batir a Red Bull. El gurú aerodinámico, fichado desde Milton Keynes como pieza clave del proyecto, ya no forma parte de la estructura de Silverstone.
Su salida llega en plena crisis de resultados. El AMR25 ha dejado de ser competitivo, alejado a más de un segundo de la cabeza, y Fernando Alonso pelea cada fin de semana contra un coche limitado.
Fallows ya había sido apartado de las operaciones en pista. Ahora, directamente, ha desaparecido del organigrama. Aston Martin busca un nuevo rumbo, en un movimiento que confirma el inicio de una nueva etapa.
Alonso no se rinde
Mientras tanto, Fernando Alonso mantiene su filosofía inalterable. «No nos vamos a rendir», repetía en Bahréin tras otro fin de semana complicado. El asturiano, que solo tenía ritmo para superar al Sauber, confía en que el trazado de Jeddah le permita volver a pelear por puntos.
El problema es profundo: falta tracción, falta paso por curva lenta y falta velocidad punta. «Necesitamos mejorar el coche, necesitamos cambiar cosas», reclamaba Alonso.
La marcha de Fallows es solo el primer capítulo de un Aston Martin que empieza a mirar a 2026, pero que antes necesita que Alonso pueda seguir luchando en la zona media.
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