
Carlos Sainz ha firmado su mejor clasificación como piloto de Williams al lograr una destacada sexta posición en la parrilla del Gran Premio de Arabia Saudí. Un resultado que no solo consolida la progresión del madrileño en este arranque de temporada, sino que lo sitúa por delante de referencias como Lewis Hamilton, Yuki Tsunoda… y un Ferrari y un Red Bull.
Después de un debut accidentado en Bahréin y una sólida actuación en Sakhir, Sainz ha vuelto a exprimir el potencial del FW47 en Jeddah. “Contento con otra buena vuelta en Q3”, declaró tras la sesión. “Segundo fin de semana donde saco el máximo rendimiento y cada vez estando más cerca del límite”.
El 1:28.168 que lo catapultó al sexto puesto es también un símbolo de cómo el español está encontrando el equilibrio entre su estilo de conducción y las características de un monoplaza que, por momentos, ha sorprendido por su competitividad en tandas cortas. Más aún si se considera que su compañero, Alex Albon, no logró pasar a Q2.
Sainz también valoró con pragmatismo su posición: “Va la segunda carrera seguida en la que salimos delante de un Ferrari y un Red Bull. Veré si merece la pena luchar contra ellos o asegurar buenos puntos para el equipo”. La estrategia parece clara: priorizar el rendimiento colectivo sin renunciar a exprimir cada oportunidad.
El madrileño destaca en un fin de semana donde la mayoría de equipos apunta a una estrategia de una sola parada, lo que convierte la salida en un momento clave. “Seguramente mañana me sienta con ganas de pelearlo, aunque quizás lo mejor es no meterse en muchos líos. Pero lo vamos a intentar pase lo que pase”, concluyó.
Desde NF1 estaremos atentos a la evolución de Sainz en la carrera, donde buscará convertir una gran clasificación en puntos que refuercen su posición en una parrilla más abierta que nunca.